El eje temático se centra en un análisis de la calidad de la educación superior, a partir de los desafíos que plantea la realidad actual del sector en América Latina y el Caribe.

Se organiza en tres grandes capítulos:

El primero se refiere a las características de la educación superior en la región, considerando los cambios en la demanda por educación superior, la diversificación de la oferta y los retos asociados a la necesidad de articular la educación superior tanto con los niveles previos – educación básica y media – como entre los distintos niveles correspondientes a la educación terciaria.

El segundo, plantea una visión de la calidad de la educación superior que combina la identidad institucional expresada en las prioridades que se desprenden de su misión, con la pertinencia de sus propósitos, en tanto se hacen cargo de las necesidades y demandas del medio que la institución definió como su ámbito de influencia (social, disciplinario, profesional, normativo). Un análisis de las experiencias de aseguramiento de la calidad en la región permite identificar experiencias, lecciones, resultados positivos y problemas que hay que abordar, entre los cuales destaca una cierta ‘fatiga de la evaluación’, que tiende a burocratizar estos procesos y reducir su capacidad para promover la mejora continua.

La tercera sección tiene por objeto identificar aspectos que es preciso mantener y reforzar, así como las áreas donde es preciso reformular los procesos de aseguramiento de la calidad, con el objeto de que estos sean, fundamentalmente, una oportunidad para fortalecer en las instituciones su capacidad para hacerse responsables por niveles crecientes de calidad en todas sus funciones y tareas.